El mareo que tiene la Junta de Andalucía con La Cónsula y La Fonda le está pasando una factura social muy importante. En el sector turístico se piensa que no hay derecho a ese maltrato desde hace tantos meses, a los continuos cambios de fecha para cumplir las obligaciones de pago y, sobre todo, a no valorar en su verdadera dimensión el inestimable prestigio que estas escuelas de hostelería han proporcionado a nuestra Costa del Sol y más allá de nuestra provincia.