Vicente Almenara.- Antonia Alba es una abogada que pelea en condiciones de desigualdad contra un sistema que ha pasado de tener discriminada negativamente a la mujer a encadenar al hombre con la Ley de Violencia de Género por la cual la igualdad de los sexos ante la Justicia es pura quimera. En esta conversación, abierta y desprejuiciada, Antonia trata los temas que ocupan y preocupan a miles de padres que han perdido a sus hijos y no los ven desde hace años, o que son acusados falsamente, algunos de los tabúes del feminismo más extremista.
Destacas, principalmente, en el panorama del derecho por la defensa de hombres que no tendrían otra defensa. Cuéntanos cómo es tu trabajo.
Soy abogada penalista especializada en delitos sexuales. He llevado puntualmente Derecho de Familia ya que, al ser de un pueblo muy pequeñito, Conil de la Frontera, en Cádiz, no puedes especializarte y tienes que ir cogiendo de todo. Entonces llevaba algunos divorcios de manera puntual, pero a raíz de llevar temas de abusos sexuales me di cuenta de que, cada vez más, estaban utilizando en procedimientos de divorcio lo que llamamos “la bala de plata”. La bala de plata es cuando al denunciar por violencia de género y no conseguir lo que se pretendía de ninguna de las maneras pues ahora voy y te denuncio por haber abusado sexualmente de mi hijo o de mi hija. Esto conlleva una paralización de las visitas o acercamiento que el padre pudiera tener con los hijos en espera de que se investigue el procedimiento. Entonces, hay procedimientos que se eternizan. En concreto, conozco el caso de un padre que ha luchado en los juzgados durante años para demostrar su inocencia, de que en ningún momento ha abusado sexualmente de sus hijos y hace cinco años que no los ve y después de haber sido absuelto, de que la otra parte recurriera porque no tenía viabilidad, la madre con los niños se han ido del sitio donde estaban residiendo y el padre ha tratado de volver a entablar relación con los niños y no lo ha conseguido, y los juzgados son tan lentos que ahora dicen que tienen que ver si es contraproducente, o no, que el padre vuelva a tener relación con los niños porque ya hace cinco años que no los ve. Entonces crea una sensación de impotencia ver como la justicia es tan lenta y es tan mala para decidir sobre algo tan importante como son los niños. Porque, al final, termina premiado el que es malo, el que es ruin, el que utiliza el sistema de manera torticera para conseguir cualquier interés espurio que tuviera en cada separación. La gente ya no se separa porque “ya no te quiero”, ahora es “sé que no te quiero, pero te voy a amargar la existencia mientras esté viva/o”.
Ahora con todo el tema del coronavirus, la mayoría ha cogido y ha dicho “mis niños no salen de aquí”, a pesar de que a lo mejor ella tiene una profesión de riesgo (médico, enfermera, cajera de supermercado…) pero ha decidido que sus hijos están mejor en su casa quedándose solos o con algún familiar que con el padre, cuando ese padre, a lo mejor, está haciendo teletrabajo desde casa y sería más seguro que se quedaran con él. Cuando sale el real decreto sí se acuerdan de decir que se puede salir con las mascotas, pero no se acuerdan de los niños de todas estas parejas divorciadas, no hay ningún llamamiento a decir: “ojo, las sentencias judiciales hay que cumplirlas”. El Consejo General del Poder Judicial dice “que cada uno haga lo que le dé la gana”, por lo tanto, cada junta de jueces de cada sitio ha decidido que las sentencias hay que cumplirlas y si no, se puede interponer el procedimiento 158 que es lo único que permite el real decreto, porque presentar una ejecución de sentencia no es uno de los procedimientos esenciales que permite el real decreto, pero les da igual. Por ejemplo, yo he presentado un 158 para que un padre esté con el hijo, lo presento una tarde y al día siguiente me contestan que no, siendo imposible que se hayan leído mi escrito, que lo mejor es que el niño no se mueva y ya se verá después del confinamiento qué es lo que pasa. Como cada juez puede adoptar el criterio que quiera, entonces un montón de juntas de jueces primeramente han decidido que las sentencias hay que cumplirlas, pero cuando se han visto desbordados de procedimientos han reculado. Esto deja en una total impunidad. Parece que el sistema está a favor de la mujer porque sí, y no caso por caso, y el hombre está totalmente desvalido ante la justicia.
¿Esta situación qué vías de posibles soluciones tiene, si es que las hay?
No se le da ninguna importancia ni ninguna prioridad y estamos jugando con la generación que viene. Estos niños se están criando en el rencor que una parte, en el caso de la madre, mayoritariamente, le está metiendo respecto al padre. Cuando el niño se dé cuenta de esta realidad va a terminar odiando y guardando rencor a esa parte, con lo cual qué niño estamos criando si los pilares fundamentales que son su padre y su madre están en una guerra viva donde la madre le ha enseñado a odiar a ese padre.
¿Los jueces se han vuelto de la noche a la mañana feministas?
Lo que creo es que los jueces tienen miedo. Tienen miedo a manifestaciones, tienen miedo a los medios de comunicación, tienen miedo y me da pena y lástima por ellos porque son gente que se han preparado una carrera de Derecho, que yo la tengo y es difícil, unas oposiciones súper difíciles para ser juez, y ahora están así. Pocos jueces toman la decisión de aplicar la Ley como ellos consideran que la tienen que aplicar y no como le dicen los medios de comunicación, o tal partido político, o el seguimiento de una ideología política. Lo que yo hecho mucho de menos son jueces valientes. Por ejemplo, yo soy juez y tú me incumples una sentencia, y la primera vez que la incumples llamo a los dos abogados a mi despacho y les dejo claro que “la sentencia se hace una vez, y no 20 veces. Esa sentencia se tiene que cumplir, así que comunicádselo a vuestros clientes”. Eso la primera vez, a la segunda vez de incumplimiento modificaría el régimen, le doy la custodia del niño al padre y la madre es la que se queda con el régimen de visita, porque no se puede incumplir una sentencia. Pero esta actuación ningún juez la hace. Y hablan de machismo y cada vez va a haber más. Yo siempre pongo este ejemplo y es que cuando tienes un perro y le pegas una patada el perro se va y hay veces que vuelve, cuando repetidamente le pegas una patada al perro hay perros que se van y nunca más vuelven, pero hay otros perros que te muerden. ¿Cuándo esto ocurre quién es el malo, el perro o el que da repetidamente patadas?
“Parece que el sistema está a favor de la mujer porque sí, y no caso por caso, y el hombre está totalmente desvalido ante la justicia”
Pero es difícil que calen estos argumentos, que son naturales, sencillos y no forzados, en la sociedad. La gente parece que vuelve la espalda a esta realidad, ¿no?
Si hablas de esto con la gente, todos terminamos en el mismo punto, en el punto de la coherencia, pero yo no sé lo que pasa después. Cuando dicen “es que en generaciones anteriores las madres estaban en la casa y los padres eran los que trabajaban fuera”, como tu comprenderás eran las madres las que estaban preparadas para criar a esos niños, única y exclusivamente, porque los padres se iban por la mañana y volvían por la noche. Esas mismas mujeres son las que han criado esta generación de machistas porque eran las encargadas de la educación de los niños. Pero esto no se puede decir abiertamente porque si no eres una mala mujer y no perteneces a su tribu, a su clan, y te deberían pasar miles de cosas. Yo he tenido en mi casa escondidas a mujeres maltratadas, así que no me hable nadie del maltrato porque estoy bastante sensibilizada, y lo mismo que hay hijos de puta, hay muchas hijas de puta. Lo único que estas hijas de puta están amparadas por el sistema, tienen abogados de oficio y pueden entablar todos los procedimientos que les dé la gana, en cambio los hombres se tienen que defender la mayoría con abogados de pago e incluso no pueden entablar más procedimientos, como para poder resarcir su honor en un procedimiento donde se la pueda condenar por denuncia falsa, porque se tiene que gastar el dinero. Como he dicho antes, si hay jueces poco valientes para llamar la atención a madres por el incumplimiento de sentencias, tampoco hay jueces valientes para entablar un procedimiento y llevarlo a término por un delito de denuncia falsa porque como siempre es difícil de probar y, además, desde arriba vienen órdenes de decir “a las mujeres no tocarlas porque si tocáis a las mujeres que son realmente maltratadas les va a dar miedo denunciar”. Ahora con esto del coronavirus ha bajado muchísimo la violencia de género, pero como ven que el negocio se les va, lo están vendiendo como que las pobres están maltratadas viviendo con los maltratadores en su casa, cuando la realidad es que, si se llama a la Guardia Civil, se presenta en la casa y se lleva al marido. A la Ley de Violencia de Género, a la Guardia Civil y a los jueces les da igual el Covid y el confinamiento. Es decir, si una mujer denuncia por maltrato, ese hombre no vuelve a entrar en la casa, así que no digan que están aguantando maltrato por el confinamiento. El hombre sale detenido con una orden de alejamiento y no vuelve, y si no tiene dónde quedarse a dormir no le importa a nadie.
Lo sorprendente también es que esta situación esté amparada, no solamente por los dos partidos que forman coalición en el gobierno, si no por el Partido Popular, porque el PP firmó en su momento la Ley de Violencia de Género. Parece que hay un amplio consenso de las fuerzas mayoritarias en torno a esto, ¿no?
Todos los partidos están vendidos a la industria del género. Nadie es valiente para decir lo que piensa, nadie es valiente para defender la coherencia porque, sinceramente, la coherencia no debe tener color político. Todas las personas de bien estamos en contra de cualquier tipo de maltrato, ya pueda venir de un hombre o de una mujer, o que pueda venir de un niño, de quien sea, y en este punto deberían confluir todos los partidos políticos. Lo que no puede ser es que se despenalice, por ejemplo, el insulto cuando es de una mujer hacia un hombre, pero sí se pene cuando es de un hombre hacía una mujer y que puede conllevar una orden de alejamiento y que no veas a tus hijos y demás. Entonces la mujer se va impune.
El tema de la igualdad ante la ley es una ficción.
E arcaico totalmente, y lo que yo veo es que hay un beneficio en la carga de la prueba, eso de decir “yo soy inocente hasta que se demuestre mi culpabilidad” en una violencia de género no se cumple. Como te denuncien por violencia de género, Dios quiera que puedas probar que no estabas allí en ese momento. Mira, en una ocasión fui a Valencia a dar una charla en la que un policía nacional contó por encima su historia, me di cuenta de que, mientras estábamos con la charla, este policía no paraba de hacer selfis con nosotros de fondo. Posteriormente, fuimos a comer con él y varios compañeros más y seguía haciéndose fotos. Yo pensaba que era por presumido o por rarito, hasta que al ir a pagar el almuerzo nos pidió hacerlo con su tarjeta y nosotros le dábamos el dinero porque nos confesó que eso le salvaba de siete u ocho denuncias falsas al quedar todo registrado en tickets, justificantes y fotos. Estaba monitorizando su vida. En realidad, al hacer las fotos con nosotros buscaba siempre un fondo en el que apareciera un reloj (un campanario de una iglesia, una marquesina digital, etc…) para poder probar que ese día y a esa hora estaba ahí conmigo. Nos quedamos helados. ¿Cómo se puede estar cada 15 minutos tratando de buscar la ubicación para echar una foto, publicando fotos con tu ubicación, etc… para justificar tu localización en todo momento? Nos contó, por ejemplo, que una vez se salvó porque tenía entradas del cine, fotos del cine, con la hora, la fecha, la película, cuando la mujer decía que había estado en tal sitio.
Esto le puede servir para contraargumentar una denuncia falsa. Claro, pero cuando todo pase. Cada vez que ella denuncia, eso le sirve para no terminar detenido, pero muchos procedimientos se eternizan. Hay procedimientos que se archivan automáticamente y otros que se quedan más tiempo abiertos, inactivos, en espera de que el juez lo mire con todas las pruebas que él presenta, pero abiertos. Además, al ser un funcionario público no tiene derecho a abogado de oficio, cada vez que se le denuncia, al ser un investigado, tiene que llevar un abogado. Y cuando termine todo, que será dentro de cinco o diez años, podrá presentar un procedimiento donde le impute a ella una denuncia falsa, pero ¿cuántas denuncias falsas no habrán prescrito cuando él pueda presentar esa denuncia? Y me pregunto como persona si yo podría vivir así. Si la gente no está muy equilibrada pueden pasar desgracias que es lo que está pasando, y es lo que no le importa al gobierno progresista. Siempre digo que en esta guerra el gobierno progresista nos ha puesto a las mujeres a morir a los pies de los caballos, en primera fila, y no le importan las muertas, lo que le importa es que haya más para arengar a la gente a la calle. Los jueces tienen miedo porque a la mínima sentencia se fletan autobuses pagados por los partidos políticos para que ocupen las calles, como ha pasado, por ejemplo, con el tema de La Manada, o el tema de La Arandina club de fútbol. Y no nos olvidemos de las manifestaciones del 8M y el posible contagio de miles de las participantes. Va a pesar como una losa en el movimiento feminista extremo. No les hemos importado. Podemos está llegando a decir que el Covid es machista porque Vox lo está relacionando con el 8M, cuando es a ellos a los que no les importamos nada y echaron a la calle manifestaciones multitudinarias en todos los puntos de España a sabiendas de que los contagios el lunes siguiente se multiplicarían por cien y no les importaba nada. Y, encima, ellos han ido cayendo todos contagiados. Algunas dirigentes del movimiento feminista clásico, frente a otras olas posteriores, están muy nerviosas porque considerar mujer a cualquier persona que se sienta mujer pone en peligro su estatus y, por lo tanto, un hombre podría considerarse mujer en un determinado momento cuando fuera la Guardia Civil a desalojarlo de su casa y entonces no habría violencia de género. Entiendo que ahí se perderían todos los privilegios que hasta ahora ha conseguido el movimiento feminista extremo. ¿Crees que puede venir el fin de este movimiento por implosión más que por la acción de la Justicia u otras causas externas? Espero que sí. Espero que sea el principio del fin. Esto lo terminaremos las mujeres, las mujeres con dos dedos de frente. Te puedo comprar la idea de que en algún momento de la historia fueron buenas las políticas de discriminación positiva para darle un empuje a la mujer, pero en la actualidad se han pasado. Han creado una guerra y ahora somos enemigos. El hombre no puede estar nunca tranquilo ante una mujer. Yo tengo amigos profesores que no cierran la puerta en una tutoría con alumnas. Hemos pasado de ir acojonadas como alumnas al despacho de tu tutor para revisar el examen y rascar un poco la nota a que el acojonado sea el tutor porque le puedas meter en un lío por otro motivo totalmente distinto. La mujer no se está relacionando con normalidad con los hombres porque te están bombardeando diciendo que los hombres son malos, machistas y maltratadores. Que un hombre te abra la puerta, que antes a la mujer le parecía algo normal por educación y galantería, ahora recela. O como, por ejemplo, con el sistema de cuotas, que me parece mal. Quiero que la gente llegue a su puesto de trabajo por lo que vale, por su capacidad, por sus conocimientos y no por ser mujer y tener que cumplir un cupo. El sistema de cuotas se lo inventaron hasta que han llegado al poder, porque en el Ministerio de Igualdad el 90 por ciento son mujeres, ¿dónde queda la paridad del 50 por ciento? Son cínicas, han vendido un discurso simplemente para coger una silla en el poder, y ahora lo que están haciendo es mantener la silla, y la mayor prueba ha sido el 8M. Ahora, la mayor parte de la gente que está muriendo con el Covid son hombres y ese dato no quieren decirlo, prefieren decir que el Covid es machista porque estamos diciendo que los contagios se han precipitado por el 8M, porque en el momento que la OMS lo recomendó deberían haber parado, pero si se para eso, se detiene el negocio.
BREICO
28 abril , 2020MAFNIFICO ARTICULO,Y MANIFICA ESTA ABOGADA,QUE ATREVE A DECIR LA VERDAD,DE TODO,GRACIAS ANTONIA.ESPEREMOS QUE LLEGUE A TODO EL MUNDO,Y ALGUN DIA ,PODAMOS CAMBIAR ESTO,POR EL BIEN DE LOS NIÑOS,Y DE TODOS,Y SE EVITEN SUICIDIOS Y ASESINATOS,ANTE LA IMPOTENCIA ,QUE LLEVA A LA LOCURA Y PUEDE LLEVAR AL SUICIDIO O AL ASESINATO! LE DARÉ LA MAXIMA COMUNICACION A MIS AMISTADES. MUCHAS GRACIAS,A ANTONIA Y A ESTE PERIODICO!