El juez José Castro, del caso Nóos, en el libro de memorias que acaba de publicar escribe: “La fiscalía anticorrupción desató, valiéndose de inusuales alianzas, una guerra sin sujeción a reglas para salvar a la infanta”. La obra ha sido escrita cuatro años después de que el Tribunal Supremo cerrara la causa en la que impuso a Iñaki Urdangarin casi seis años de cárcel y confirmase la absolución de Cristina de Borbón, a la que consideró, no obstante, partícipe a título lucrativo de la trama. En Barrotes retorcidos. Memoria de un juez (Documenta Balear, 2022), Castro explica que “siempre supo” que el yerno del rey emérito y su socio, Diego Torres, “solo aportaron su interés por obtener dinero fácil” y que “fueron otros quienes diseñaron la estrategia para conseguirlo, tanto en empresas privadas como en administraciones públicas, así como para su aprovechamiento”.