Como militar logró una importantísima y decisiva victoria del ejército español sobre Gran Bretaña en el Golfo de México, en la ciudad que dio nombre a tan importante batalla, Pensacola. Poco tiempo después, el ‘héroe de Pensacola’ se apoderó de la isla Nueva Providencia en las Bahamas, abortando el último plan británico de resistencia, con lo que mantuvo el dominio español sobre el Caribe y aceleró el triunfo de las armas norteamericanas. La consecuencia para España fue la recuperación de las dos Floridas (Florida Occidental y Florida Oriental), lo que hizo que los ingleses se quedaran sin plazas en el golfo de México, exceptuando la isla de Jamaica.
Su intervención se consideró tan decisiva para el triunfo de las tropas americanas que durante la parada militar del 4 de julio, Día de la Independencia Americana, desfiló a la derecha del mismísimo George Washington en reconocimiento a su labor y apoyo a la causa. Un retrato de Bernardo de Gálvez cuelga actualmente de las paredes del Capitolio de EEUU y, recientemente, ha sido distinguido con la Ciudadanía Honoraria de Estados Unidos, distinción concedida hasta ahora solamente a siete figuras históricas.