Los EEUU, que no se andan con exquisiteces, se aplican a la ciberguerra y las operaciones policiales en su guerra contra el yihadismo. Por primera vez, el presidente Obama ha informado que el cibermando norteamericano lleva a cabo operaciones contra el ISIS desde su sede en Fort Meade, Maryland. Cuenta con casi 5.000 empleados. Se trata de infiltrarse en las redes y servicios informativos para manipular o destruir sistemas, captar comunicaciones entre mandos, hackear los foros cerrados (deep web), esparcir virus… Es la guerra en otro espacio, el virtual.