Grupo ANP
La información que detallamos depende de los cambios que se puedan producir en la evolución de la enfermedad y en el conocimiento de nuevos factores que pudieran afectar a su período de evolución, forma de transmisión, incidencia etc. Por tanto, puede variar cuando se reciban nuevas actualizaciones.
¿Qué son?
Una amplia familia de virus que normalmente sólo afectan a los animales. Algunos pueden transmitirse a personas y producen cuadros clínicos que van desde el resfriado común hasta enfermedades más graves.
Este nuevo tipo que nos ocupa puede afectar a personas y se ha detectado por primera vez en diciembre de 2019 en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, en China.
¿La transmiten los animales?
Aún se está investigando, parece ser que la fuente inicial fue algún animal, puesto que los primeros casos se detectaron en un mercado donde había animales.
¿Cuáles son los síntomas?
Hasta ahora, tos, dolor de garganta, fiebre y sensación de falta de aire. En los casos más graves puede provocar neumonía y dificultad para respirar, fallo renal y la muerte.
Los casos más graves, (al igual que para la gripe y otras infecciones), ocurren en personas ancianas o que padecen enfermedades del corazón, pulmón o problemas del sistema inmune.
¿Cómo puedo contagiarme?
Parece que la transmisión sería por contacto con animales infectados o por contacto estrecho con infecciones respiratorias que se generan con la tos o el estornudo.
Parece poco probable la transmisión por el aire a distancias mayores de uno o dos metros.
Para que se produzca la infección se necesitaría un contacto directo de las secreciones respiratorias de la persona enferma.
¿Existe tratamiento?
Actualmente, no existe un tratamiento específico, s’i hay tratamiento para control de sus síntomas, por lo que la asistencia sanitaria mejora el pronóstico.
¿Qué tengo que hacer para protegerme?
Realizar una higiene de manos frecuente (lavado con agua y jabón o con soluciones alcohólicas, especialmente después de contacto directo con personas enfermas o su entorno.
Evitar el contacto estrecho con personas que muestren síntomas de afección respiratoria: cubrirse la boca y la nariz con pañuelos desechables al toser o estornudar y lavarse las manos.