Portando petos del citado sindicato, insultaron y agredieron al responsable de la sección sindical de CSIF en el centro penitenciario y le increparon por no apoyar la movilización

Delegados del sindicato ACAIP en Málaga han increpado y agredido al responsable de la Sección Sindical de CSIF en el Centro Penitenciario de Alhaurín de la Torre por no secundar la protesta que ACAIP había organizado en las puertas del centro.

Portando petos del citado sindicato, varios miembros de la organización de la concentración increparon al delegado de CSIF, C.L.M.N., que intentaba entrar con su vehículo en su centro de trabajo. Los miembros de ACAIP comenzaron entonces a insultarle por no secundar la movilización, acercándose varios de ellos al vehículo del delegado de CSIF, agrediéndole por la ventanilla del coche bajo gritos de “Hijo de puta, me cago en tu puta madre, esquirol”.

El delegado de CSIF, electo de Junta de Personal, ha dado parte a la Inspección de Instituciones Penitenciarias, al director de su centro de trabajo así como a la Guardia Civil ante los hechos cometidos por los miembros del otro sindicato, que fueron identificados por los agentes de la Benemérita.

El sindicato informa que “por si fuera poco, los miembros de ACAIP amenazaron de nuevo al delegado de CSIF con la posibilidad de estar grabando todo lo ocurrido, hecho que también ha sido puesto en conocimiento del director del centro penitenciario ante las restricciones que los centros tienen en cuanto a la autorización de las grabaciones”. Termina CSIF lamentando lo ocurrido: “Por los valores democráticos y de respeto que siempre ha defendido y llevado a gala, CSIF condena los hechos y la agresión del delegado de Instituciones Penitenciarias y anuncia que se personará en defensa de su delegado y lo asesorará a través de su Asesoría Jurídica. CSIF-A no entiende ni comparte que sólo por no compartir los motivos de una protesta, miembros de un sindicato puedan llegar a increpar, insultar y agredir a un compañero que sólo defiende otras siglas e ideales sindicales, dañando de esta forma el buen nombre del sindicalismo, de los sindicatos y de cientos de miles de sindicalistas que respetan el trabajo, las ideas y los posicionamientos democráticos del resto de compañeros”.