El Instituto de Política Social Española denunció el pasado 1 de julio ante la Delegación del Gobierno de Madrid lo que considera una “imposición ideológica” al consentir que las banderas LGTB ondeen en las administraciones públicas. El presidente del Instituto, Pablo Hertfelder García-Conde, señaló que las administraciones públicas no pueden ni deben desobedecer las leyes vigentes y sentenció: “La ley está para cumplirse y sin ley no hay democracia. Nos queda claro que el gobierno socialista está realizando unos guiños muy claros al colectivo LGTB y esto es intolerable, es por ello que denuncio ante la Delegación del Gobierno que se cumpla de inmediato la ley que sentencia que no deben ondear más banderas que las oficiales de un país, la bandera LGTB no es una bandera oficial, es una bandera ideológica”, señaló Hertfelder García-Conde.
El Instituto, por su parte, ha señalado que no se trata de ser homófobos, sino de hacer cumplir la ley y, por lo tanto, responder con contundencia ante los ataques a la ley que las propias administraciones públicas están consintiendo al violar una ley y una sentencia firme de un juzgado supremo.