Cuando un comensal sale de un restaurante, sabe si ha comido bien o no, y eso es lo que sucede en La Vikinga, en la calle Federico Fellini de Málaga, local regentado por Marta Brinkmann y Rafael Palomo. Su gazpachuelo, el rodaballo con arroz venere, la pastela y otros bocados son, realmente, exquisitos. Merece que reservemos mesa. Marta ya estuvo al frente de Los Vikingos, en el Paseo de Sancha, y sabe de este difícil negocio. Suban todos los que trabajan en el establecimiento a nuestro Paraíso y sírvanse también de los manjares que a todos cuantos llegan ofrecemos.