Valientes y desprejuiciadas declaraciones de Soledad Becerril, ex ministra de Cultura y ex Defensora del Pueblo, en El Mundo el pasado 7 de enero: “Se comprenden muy bien las exigencias de países europeos que solicitan que los emigrantes cuenten con documentos en regla, con ofertas de trabajo y en número de acuerdo con la capacidad de acogida de cada país”. Algo tan razonable y de sentido común qué trabajo cuesta de asumir por muchos de los políticos españoles. Suba a este Paraíso por decir lo que muchos españoles pensamos.