Un tribunal de apelaciones de Nueva Orleans autorizó el pasado 8 de octubre el restablecimiento de la ley del aborto en Texas. La norma que entró en vigor el 1 de septiembre y estaba bloqueada temporalmente por un juez, prohíbe todas las interrupciones una vez que se detectan latidos del corazón del feto, alrededor de las seis semanas de gestación. Un éxito de la ley que, como no podía ser de otra forma, fue democráticamente aprobada, y de los antiabortistas, que mantienen su lucha aunque sin el eco de la mayoría de los medios de comunicación.