Vicente Almenara.– Juan Cruz (Puerto de la Cruz, 1948) es periodista del diario El País, escritor y editor. De memoria prodigiosa, también se expresa con facilidad sobre esto o aquello y es que lo que ha leído este hombre solo cabe en pocas bibliotecas. Ha sido el director del curso de verano de la Universidad de Málaga La verdad de las mentiras, que ha contado con filósofos, políticos, periodistas y otros intelectuales que han dado su versión de las fake news, la postverdad y la comunicación de nuestros días.
¿Cumplen los cursos de verano un papel terapéutico?, ¿también de análisis de lo que ha ocurrido durante el año y lo que está por venir?
Mi experiencia es que son encuentros que podrían ser inteligentes dependiendo de la capacidad de relación que tengan las personas. Éstas, a veces, acuden a estos encuentros y resultan intransitivos porque no hablan con nosotros. Es un intercambio, un encuentro, ¿no? Para mí también es un modo de conocer.
Me ocurrió que, en 1970, cuando fui a Santander detrás de una novia no me hacía caso y siguió sin hacerme caso. Pues sucedió que encontré gente muy interesante, muy inteligente. Y me hice muy amigo de ellos, eran muy divertidos. Al final, amplié mi conocimiento. Pero me ocurrió una cosa muy extraordinaria. Recuerdo que fui a la playa de El Sardinero y que estaba melancólico porque la chica no me hacía caso y escuché, porque entonces ponían música, ‘Puentes sobre Aguas Turbulentas’ de Simon&Garfunkel. Años después regresé y volví a escuchar esa música. Por eso, ya merecía la pena venir a Santander.
¿Piensa que hay una correspondencia entre la situación de incertidumbre que vive el país y la producción literaria y el periodismo que se hace?
Creo que tiene que ver más con el periodismo. Acaba de salir un libro que se llama ‘Lluvia Fina’, de Luis Landero, que define muy bien el largo momento que vive este país. Y creo que la literatura no se está haciendo eco de esta situación. No encuentro un escritor hoy, exceptuando quizás a Juan José Millás, que esté contando la vida cercana. En el periodismo, lo que se está poniendo de relieve es la figura del periodista como alguien que no indaga, que no se preocupa de ver lo que hay detrás del asunto. Simplemente, cuenta lo que le van contando. Encuentro poco esfuerzo en los medios por interpretar la situación presente. Por ejemplo, me ha llamado la atención que nadie haya recontado lo que pasó en 2016 cuando Pedro Sánchez fue a ver al Rey. Al salir de allí, Pablo Iglesias ya tenía un gobierno formado. Eso es muy interesante. Y me preocupa que los periodistas no lo hayamos contado.
¿Somos más dados en esta década, en este momento, quizás a una mejor producción de ensayos que no de ficción, de novelas?
Sí. Tengo sobre mi mesita de dormir un libro extraordinario de Santos Juliá titulado ‘Demasiado retroceso’. Esto es actualidad. El ensayo es la actualidad.