Hay ONGs que desarrollan una labor encomiable y otras que socavan el Estado de derecho, sabiéndolo o ignorantes. Sergio Barciela, el supuesto experto del área de Migraciones de Cáritas Española, ha estado en Málaga en la Casa Diocesana en el encuentro Frontera Sur. El susodicho, ante la pregunta de un periodista sobre las devoluciones de inmigrantes a Marruecos, se despacha tan tranquilo: “Es necesario indicar que no han llegado únicamente personas migrantes, sino también personas refugiadas, y que la ausencia de canales legales seguros tiene como consecuencia directa estos saltos”. ¿Por qué no dice que los refugiados son una ínfima parte del total que cruza las vallas de Ceuta y Melilla, al no encontrarse éstas en la ruta habitual de los refugiados?, ¿desconoce que los refugiados pueden pedir asilo en nuestro país o en otros por cauces legales sin saltar vallas o agredir a policías y guardias civiles con cal viva, como ha sucedido?
Los Estados tienen fronteras y la ley es producto de la representación política de la soberanía popular en una democracia y saltársela es cometer un delito. El señor Barciela esconde todo esto y mucho más. Baje a esta mazmorra y reflexione sobre cómo la verdad nos hará verdaderamente libres, según San Juan, él que pertenece a una organización de la Iglesia.