El canal de televisión La Sexta ha pedido disculpas por señalar a supuestos votantes de Vox en Marinaleda en las pasadas elecciones autonómicas andaluzas. El reportaje se incluyó en un programa llamado Liarla Pardo, lo que ya dice bastante.

Lo que faltaba, que medios de comunicación afines a la extrema izquierda le hagan el trabajo de localizar a sus enemigos, que no adversarios, políticos. Desde luego, si estos supuestos votantes del partido de Abascal sufrieran algún daño habría que mirar en dirección a La Sexta, que los ha señalado.

Se grabaron imágenes del domicilio de un vecino, comentando: “Aquí puede vivir un votante de Vox”. Es nauseabundo que se persiga y señale a un ciudadano por sospechas de que ha votado a este o a aquel partido, hasta ahí llegan algunos medios sin ética profesional alguna. La periodista, Cristina Pardo, publicó al día siguiente en su cuenta de Twitter: “Hola a todos. Ayer nos equivocamos. El reportaje de Marinaleda fue desafortunado. Y por eso, mis disculpas.”

Tras conocerse los resultados de Vox en Andalucía, con 12 escaños, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, lanzó una “alerta anti-fascista”, así la llama él, y claro, algunos acudieron, incluso medios de comunicación. Reprobable desde todo punto de vista. Pase La Sexta, los autores el programa y la dirección de la cadena, a esta mazmorra por sus bochornosas prácticas delatoras.