La Misión Internacional Independiente de Investigación, comisionada por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, ha publicado un informe que ya se ha hecho público sobre el imperio del terror impuesto por el chavismo en Venezuela para mantenerse en el poder, lo que incluye desde ejecuciones extrasumariales hasta torturas, pasando por desapariciones forzosas, abusos sexuales, violencia contra las protestas y detenciones arbitrarias. Los expertos de la ONU, sobre todo, se han atrevido a señalar a los principales culpables: Nicolás Maduro y los generales Néstor Reverol y Vladimir Padrino López.

Según los datos disponibles, de 109 víctimas de torturas en 2018 se han alcanzado las 574 del año pasado. Las fuerzas represivas de la revolución bolivariana han quintuplicado las torturas en Venezuela, coincidiendo con el desafío lanzado por el Parlamento democrático y por el presidente encargado, Juan Guaidó, contra el régimen liderado por Nicolás Maduro, según las investigaciones llevadas a cabo por la ONG Provea. Bajen a esta mazmorra los autores de tanto crimen y los que aquí guardan un ominoso silencio cómplice.