Que José Luis Rodríguez Zapatero, ex presidente del Gobierno de España, se haya entrevistado con el caudillo Nicolás Maduro para pedirle “más diálogo y comprensión” resulta cuanto menos ingenuo sino fuera porque casi inmediatamente después se celebraban elecciones en aquel país y esta visita representó una baza para el sucesor de Hugo Chavez. Para más inri, horas antes de recibir a Rodríguez Zapatero, maduro se despachaba a gusto contra el presidente español, Mariano Rajoy. Pese al aire insuflado al sátrapa, la oposición venezolana ganó ampliamente la convocatoria electoral.
Parece claro que el ex presidente español tiene una política exterior que no es la de España, como ya demostró en otras giras más allá de nuestras fronteras, es el caso, por ejemplo, de Marruecos.
