Cuando el pasado día 15, Pablo Iglesias anunció que se presentaba a las elecciones autonómicas de la Comunidad de Madrid y dejaba el Gobierno de la nación -y lo hacía desde un despacho oficial, hecho que ha sido denunciado a los tribunales por el PP-, llamó dos veces “criminal” a la derecha, él, el hijo del que fue un terrorista y cuando ha justificado acciones violentas de los suyos. Ya teníamos formada una opinión del sujeto, pero esperen a ver los conejos que sacará de su chistera en campaña el comunista de Galapagar.