Lo último, negar asilo a Mohamed Benhalima, ex militar condenado a muerte por denunciar la corrupción en el ejército argelino. Y lo han enviado a Argelia vía exprés, ignorando el Derecho internacional y desoyendo las peticiones de A.I. Todo sea por el gas. Bajen a esta mazmorra quienes condenan a una persona a la cárcel y sin un juicio justo en un país sin libertades.