Parece que no podrían ser otros que Santiago Martín y Ángel Nozal los que ocupen esta celda después del bochornoso episodio protagonizado junto al concejal de Podemos en Mijas Francisco Martínez. La Justicia tendrá la última palabra pero de la grabación publicada por el diario Sur se desprendería cómo se quiere conducir la voluntad del concejal podemita -que está simulando en todo momento, lo que debe tenerse en cuenta- hacia una moción de censura a Maldonado, actual alcalde, de Ciudadanos, en la población costasoleña.
Es tal el número de casos de corrupción en nuestro país que el de Mijas, si lo fuera, sería uno más, pero todos y cada uno de ellos deben perseguirse con la mayor severidad concebible, que es lo que espera cualquier español de bien preocupado por la higiene democrática de su país.