Los miembros de los CDR acusados en la Audiencia Nacional de preparar ataques, sabotajes y el asalto al Parlamento de Cataluña diseñaron, presuntamente, un plan para destruir el cableado de infraestructuras críticas con sustancias químicas y precursores de explosivos. La Guardia Civil logró intervenir una conversación en la aplicación de mensajería segura Signal en la que dos de los supuestos implicados se daban consejos para adquirir y manipular un producto altamente corrosivo con el que pretendían “deshacer las gomas de las mangueras eléctricas” que se emplean en las redes de suministro de electricidad.