“En Málaga hay unos 8.000 casos de cáncer cada año y se curan más de la mitad” - El Sol Digital
“En Málaga hay unos 8.000 casos de cáncer cada año y se curan más de la mitad”El doctor Emilio Alba lleva 30 años investigando el cáncer. (Foto: Hospital Virgen de la Victoria)

“En Málaga hay unos 8.000 casos de cáncer cada año y se curan más de la mitad”

Emilio Alba, especialista en oncología, en los almuerzos de la Tertulia del Congreso de Málaga

“La genómica y la inteligencia artificial van a cambiar las cosas radicalmente en un futuro que no es lejano”

Vicente Almenara.- Emilio Alba es una autoridad nacional e internacional en el cáncer. Fue presidente de la Sociedad Española de Oncología y es catedrático de esta especialidad en la Universidad de Málaga y jefe del Servicio en el Hospital Clínico. Habla pausadamente y de forma muy pedagógica sobre su trabajo de 30 años en la investigación del cáncer -ya salió la maldita palabra- y no tiene reparo en dar su opinión sobre cualquier asunto que se le propone en este nuevo almuerzo de la Tertulia del Congreso de Málaga. Primero hace una exposición general antes de pasar al coloquio, y entre pregunta y respuesta aprovecha para tomar un bocado de su arroz con setas. Emilio Alba toma la palabra:

El CIMES es un centro que abrió la Universidad de Málaga hace 15 o 16 años, cuyo cometido es la investigación biomédica. Allí tenemos un laboratorio de biología de moléculas del cáncer. He quedado allí con Fernando Andreu, que es hijo de los fundadores de Laboratorios Andreu y que todos recordareis. Hace cuatro años él era el director a nivel mundial de una empresa que se llamaba Sixner, mitad japonesa y mitad alemana. Ellos se dedicaban sobre todo a la biopsia líquida, que consiste en intentar ver en la sangre trocitos de ADN, algo que permite muchas cosas.

Él estuvo allí un tiempo y hoy viene de América, de una compañía totalmente diferente que viene a proponernos un convenio. Consiste en un análisis del tumor para encontrar el código de barras del tumor, pero lo hacen de sangre y de orina, y lo que ellos hacen es con la inteligencia artificial para coger esos datos y aplicar algoritmos que dan una precisión que no se había dado hasta ahora en ningún sitio. Entonces venía a proponernos que hospitales de Málaga participásemos suministrando las muestras y la información clínica a cambio de toda la información de unos análisis que hoy día no se pueden hacer porque cuestan unos 20.000 o 25.000 euros por persona y que te podían ayudar a veces en el tratamiento. La información es la clave. Ellos te lo dan todo y después utilizan esa información. Esto es un ejemplo de por donde van a ir las cosas. Se van a estudiar las enfermedades tumorales de una manera exhaustiva. Se van a digitalizar varias cosas y se aplicarán algoritmos de inteligencia artificial que te darán el pronóstico y el tratamiento a seguir. Han intervenido ya en unos mil casos y ahora debemos ver si nosotros podemos participar en esto.

 

Ahora mismo todos estamos acostumbrados a diagnosticar la enfermedad con imágenes. Imagen significa que nos enfrentamos a algo que tiene una medida. Algo pequeño de un centímetro significa que hay millones de células. Vamos al intento de encontrar la enfermedad antes de que sea visible. Todas las células lanzan a la sangre fragmentos de ADN que hasta ahora no se podían observar. Desde hace un tiempo se puede encontrar en la sangre de las embarazadas predicciones sobre el niño. En esto se aplica el mismo procedimiento, pero hasta ahora no podíamos encontrar pequeños fragmentos en sangre de enfermedades tumorales. Creo que la genómica y la inteligencia artificial van a cambiar las cosas radicalmente en un futuro que no es lejano. Hoy estamos en una situación en la que se observa que ha habido cambios importantes que yo he vivido en mis 30 años ejerciendo. Las técnicas de radioterapia han mejorado mucho y los tratamientos del cáncer también. En Málaga hay unos 8.000 casos cada año y se curan más de la mitad, más mujeres que hombres debido a la predilección de los hombres a tener cáncer de pulmón por fumar. El cáncer de mama en las mujeres ha mejorado su pronóstico bastante. La segunda causa el rectal y la tercera un tumor poco frecuente como es el cáncer de páncreas, cuyo tratamiento ha evolucionado muy poco en los últimos años. El cáncer es una enfermedad genética y esencialmente prevenible. Hay factores externos que interaccionan con el ADN. El primero es el tabaco, que está relacionado con uno de cada tres tumores. El tabaco es muchísimo más tóxico que la heroína, con la diferencia de que es legal por factores culturales. El segundo es el sobrepeso, en el mundo occidental especialmente. Otro factor es la luz ultravioleta, la luz del sol, que afecta mucho a los niños. El melanoma se da más ahora porque los pescadores y campesinos se han expuesto siempre a la luz teniendo menos melanomas, esto se debe a que esa gente se ponía a la sombra únicamente cuando podían. Ahora alternamos etapas sin tocarnos el sol con una exposición masiva en verano, algo que resulta letal para la piel. En la infancia es peor aún, pues cuando ves a los niños a pleno sol en la playa a las dos de la tarde te das cuenta de la locura que supone. La cuarta gran causa son los virus. Aproximadamente, el 15 por ciento de los tumores se relacionan con los virus. El virus del papiloma, por ejemplo, se relaciona con el cáncer de cuello de útero. Entre estas cuatro causas se reúnen más del 50 por ciento de los tumores. Creo que habría que hacer tres grandes esfuerzos: políticas de prevención, luchar contra el tabaco y el sobrepeso.

La primera pregunta al ponente hizo referencia a la situación de la batalla contra los cánceres, pues existen numerosos tipos, como bien se sabe. El doctor expuso que hay cánceres que acaban en una visita a la consulta médica habitual, hasta un tumor cerebral, que es muy grave. La dependencia del lugar donde se encuentre el cáncer es fundamental a la hora de afrontarlo. “Creo que podremos controlar el cáncer, pero erradicarlo a cero va a ser difícil. Habrá tumores que tendrán una tasa de curación alta y así se podrá reducir la mortalidad por esta enfermedad”, manifestó el especialista. Posteriormente, se mencionó el cáncer de próstata. Emilio Alba explicó que los casos de cáncer de próstata han aumentado, pero no su porcentaje de mortalidad. “En el cáncer de próstata diagnosticado por PSA, al menos tres de cada cuatro casos no pasa nada si no se hace nada. Cuando haces autopsias a varones mayores de 65 años fallecidos por otros motivos ves que tenían cáncer en células de la próstata, pero sin enfermedad”. Los casos de cáncer de tiroides también son similares al de próstata, pues los tratamientos son muy agresivos y aplicar cirugía es dificultoso en el caso de la próstata. El doctor advirtió que el cáncer de pulmón no admite casos leves, pues es el más letal.

Uno de los asistentes preguntó por la ayuda que puede aportar la tecnología a la lucha contra el cáncer. El ponente explicó que esta batalla tiene una cuestión económica importante, pues afirmó que las investigaciones necesitan “dinero, instituciones y talento”, siendo el primer factor el más escaso. Otro miembro de la mesa preguntó sobre los datos almacenados que, posteriormente, sirven para salvar la vida de personas. “Una gran barrera es el tema legislativo porque por un lado está salvaguardar la privacidad, pero el análisis masivo de datos necesita tener posibilidades”, explicó. La generación de datos es la parte más sencilla del proceso, pero el gran problema está en los análisis, pues faltan bioinformáticos para realizar dichos análisis. El doctor afirmó que “las bases de datos necesitan alimentarse”. Un tertuliano afirmó que en Estados Unidos la protección de datos se rige de manera menos proteccionista que en Europa, lo que llevó a otro comensal a afirmar que ese hecho atrasa a Europa.

Un compañero de la mesa quiso enfocar su pregunta hacía los patrones del diagnóstico médico en el futuro. El propio tertuliano afirmó que la inteligencia artificial ya se está utilizando en ciertos ámbitos para dar avisos cuando algún dato se sale del patrón. Emilio Alba dijo que cada vez se necesitan más radiólogos porque la inteligencia artificial va a trabajar más pronto que tarde con la imagen. “En el laboratorio se tendrán millones de datos de células”. Un comensal planteó si pueden llegar a existir intereses inconfesables de la industria farmacéutica. “La industria a veces se equivoca, pero no creo que sea para ralentizar, pues cuando sale un medicamento con buenos resultados se vende muy bien”, manifestó el doctor Alba. Un tertuliano mencionó una investigación que se está realizando en el Clínic de Barcelona sobre el cáncer de pulmón. El ponente dijo conocer a la mayoría de posibles participantes en el Clínic, pero que no tenía conocimiento concreto de esa investigación, aunque quiso aclarar que en el cáncer de pulmón cualquier pequeño avance es un gran paso.

Emilio Alba

Este especialista es jefe del Servicio de Oncología en el Hospital Clínico- (Foto: Hospital Virgen de la Victoria)

Un participante hizo referencia también al papel que tiene la flora intestinal. El experto aclaró que, actualmente, existen sospechas de la relación que puede tener la flora intestinal con el cáncer de colón.  “Ahora hay un tratamiento de inmunoterapia en el que se ha visto que quien recibe ese tratamiento habiendo tomado antibióticos en los tres meses anteriores durante siete días no se ve afectado por la inmunoterapia debido a las alteraciones derivadas de ese tratamiento anterior”. Un concurrente con mucho interés en el tema preguntó si carnes como el pollo o la ternera afectan de manera significativa a la gestación de cánceres como el de colón. El doctor expuso que cuanto menos variado come una persona más riesgos tiene. “La microbiota diversa previene muchas enfermedades digestivas. Comiendo vegetales se consigue”, declaró.

Un tertuliano preguntó si es una leyenda urbana el hecho de que la civilización machaca la salud de la población. “Antes se vivía menos y peor”, afirmó el ponente, que puso el ejemplo de las personas antivacunas que no entienden que las vacunas son el principal motivo de que hoy día las personas vivan más años. “Existen delirios de la abundancia. Dudo de que en ciertos lugares existan intolerantes al gluten o veganos”, aclaró.

Un comensal planteó si dadas las circunstancias actuales va a ser más o menos frecuente que las personas lleguen a vivir un siglo completo. El doctor afirmó que en las generaciones venideras es posible que menos personas lleguen a vivir 100 años debido al estilo de vida actual. Se volvió a mencionar que el estilo de vida es fundamental para ser longevo, pues es a los 80 años cuando se empieza a diferenciar quien goza de mejor salud y quien se ha cuidado menos o simplemente tiene la mala fortuna de padecer diabetes o alguna enfermedad que condicione su vida.

Un asistente bromeó con su edad y, posteriormente, dijo que la herencia genética es importante para el tema tratado. El protagonista afirmó que su progenitor falleció de cáncer de pulmón y esto lo atemorizó durante años debido a su gusto por fumar. “Hace 40 años que dejé de fumar y fue con mi propia fuerza de voluntad”, aseguró. El doctor le transmitió que hacerse una biopsia de próstata con una edad avanzada es algo innecesario. Otro miembro hizo referencia a la relación e interacciones entre el cuerpo y la mente para hacer frente al cáncer. “Hay mucha literatura y hay un cuerpo de doctrinas importante sobre esto. La oncología integrativa incorpora elementos como el ejercicio físico y esta relación. Esto impacta en la calidad de vida, pero no se sabe si afecta al desarrollo de la enfermedad”, manifestó Emilio Alba, que quiso aclarar que la medicina está acostumbrada a trabajar con mediciones y que éstas no pueden llegar a calcular, por ejemplo, el nivel de estrés de una persona. La ciencia a día de hoy es cuantitativa y así trabaja el método científico por el momento.

Un asistente preguntó sobre los posibles beneficios que puede aportar el vino para el cáncer. El doctor aclaró que el tema del vino y de la comida general resulta “espinoso”, pues el consumo de alcohol varía según la situación, eso sí, el consumo de alcohol implica más riesgo en cánceres como el de boca o el de hígado. El ponente dijo que la ginebra es el alcohol que más arrasa en nuestro estómago, siendo la cerveza y el vino los más suaves.

El estrés entró a la mesa con una pequeña broma de un comensal, pero evidentemente es un factor por el que se interesaron los tertulianos. El doctor argumentó que actualmente “vivimos en una sociedad que obliga a producir mucho. Imagínense la época en la que no existían los teléfonos, queda lejos. La línea entre el trabajo y el ocio se ha difuminado demasiado”.

Un concurrente mencionó la archiconocida metástasis que tantos males aporta en la enfermedad del cáncer. El experto fue tajante afirmando que el 90 por ciento de las personas fallecidas por cáncer es debido a la metástasis, que es el fenómeno biológico que subyace tras la enfermedad. “En un centímetro hay unos mil millones de células y en esa cantidad suceden muchas cosas. Cuando diagnosticamos un cáncer lo localizamos, pero el problema es la metástasis”, dijo.  Un tertuliano afirmó con esperanza que cuando los médicos cuenten con mejores instrumentos la batalla será mucho más ganable para la medicina.

 

Deja un comentario

El email no será público.