Ya hemos traído esta compañía a esta sección, pero da motivos continuados para repetir. La extraordinaria división en departamentos de Vodafone ocasiona un mareo terrible al cliente. En el caso de que éste quiera trasladar los servicios que tiene contratados como autónomo a otra cuenta de la que también dispone como empresa sigue un laberíntico proceso desde el 122, el 1443, el 1500, el 123… La compañía no facilita, en absoluto, la gestión del cliente y le hace perder un tiempo precioso de su jornada laboral. Por supuesto, las esperas en cada una de estas estaciones de su vía crucis son dignas de otro comentario. Muy mal servicio el de Vodafone.