De pequeños jugábamos a contar coches de un determinado color o incluso en mi colegio teníamos las ‘famosas’ banderitas blancas y rojas por todo el recinto de las gimkanas de las fiestas patronales. Los pokemon también se unieron a este juego tan sencillo a través de esa realidad virtual que nos ha hecho adictos a todos durante unos meses. Pero el que realmente ha sabido jugar con todo esto, ha sido Invader, el artista que invadió Málaga con su arte callejero hace justamente un año. Coincidiendo con La Noche en Blanco, comenzaron a aparecer por Málaga varias imágenes pixeladas que anunciaban la llegada del artista a la capital. Málaga es la invasión 65 de este artista francés, que incluso está creando que muchos aficionados organicen viajes por las distintas ciudades para cazar estos mosaicos.
En su página web, Space-Invaders.com, podemos encontrar las distintas ciudades a las que ha invadido con sus originales pixeles. Incluso como si de un videojuego arcade se tratase a través de su app Flash Invaders, el usuario gana puntos cada vez que saca una foto a una de sus obras. No solo las imágenes recuerdan a la época de los videojuegos de los 80, al tan conocido Space Invaders, sino que el propio artista tiene una estrategia completa para enganchar tanto al gammer, como al amante del arte o incluso al ciudadano a pie de calle.
Los seguidores de este artista que actualmente sigue siendo un misterio, pueden acumular puntos para competir entre ellos. Actualmente hay 29 (27 desde hace unos días) pero quiere alcanzar los 50, un número redondo que se le está resistiendo al artista en la capital debido a diferentes problemas con las autoridades. Pese a la dificultad del acceso de su arte a museos y galerías, Invader ha sabido crecer y crecerse en la adversidad, tanto que su cotización ha crecido de tal manera que muchos han intentado arrancar de los muros sus creaciones. Imposibles de despegar y que salgan intactas, claro.
Pero estos mosaicos tan queridos por los malagueños y que ya forman parte de la cultura artística de la ciudad están en peligro de extinción. La Fiscalía de Málaga se querelló contra Invader por plasmar varios mosaicos en distintos lugares de la ciudad, algunos de ellos considerados bienes protegidos. Y ahora el Ayuntamiento de Málaga les da dos semanas a los propietarios de los inmuebles para que retiren los mosaicos del artista. Algunos propietarios ya han ‘cumplido su obligación’ destrozando una obra de arte que, aunque en un principio no regala caché, comulga con la parte artística y cultural en la que se ha sumergido Málaga los últimos años. Pero lejos de esto, el Ayuntamiento no predica con el ejemplo, porque hasta ellos mismos deciden hacer oídos sordos y ‘aplazan’ la retirada de los mosaicos para cuando puedan hacerlo sin dañar la obra, cosa imposible según el artista que ya comentó que sus obras están colocadas de tal forma que no se puedan retirar sin romperse para que no puedan especular con ellas ni robarlas. Así que… ¿ahora qué movimiento y/o camino seguirá el alcalde de Málaga y su gobierno municipal?
Necesitamos arte en nuestro camino diario, para hacernos partícipes, para sacar el arte de los museos y que el malagueño aprenda a hacer sus rutas artísticas paseando por las calles… ¿No es mejor que el malagueño y el visitante vean arte de una forma diferente? Esto es culturizar a la sociedad malagueña. Un par de años atrás pudimos ver versos de canciones del rapero y poeta Rayden en cada paso de peatones del centro de Madrid. Un ‘Te comería a versos’, ‘No hay mejores brindis que los que hacen tus pestañas’, o ‘Mi más sentido bésame’, hacían sonreír al peatón cada vez que cruzaba la acera e incluso la espera del semáforo se te hacía amena y no eterna. Invader deja huella, ¿crees que deberían sancionarle o agradecerle que eligiese Málaga como lienzo y a los malagueños como espectadores?