Editorial – En defensa del Rey frente al Gobierno ultra y los golpistas catalanes
La ausencia del Rey en el acto de entrega de despachos en Barcelona a los nuevos jueces españoles, por indicación del Gobierno y para complacencia de los golpistas catalanes, es una afrenta a la Monarquía, a la figura de Felipe VI y, por extensión, a todos los españoles. La voluntad de poder, a costa de lo que sea, del presidente Sánchez representa un precio altísimo que pagamos todos en forma de erosión de la democracia. Cuando el Gobierno no recurre a Franco, recurre al Rey para salvar sus imposturas.