Editorial – El guerracivilismo del Gobierno censura nuestra Historia
De algunas personas, vistos algunos de sus comportamientos, se puede esperar cualquier cosa. De este Gobierno, también. Que permanentemente gire su discurso, mediante cualquier recurso retórico barato, acerca de la guerra civil española y se empeñe en borrar la memoria de media España ya hace tiempo que resulta nauseabundo. La exhumación por decreto del cadáver de Franco ha sido, hasta ahora, la mayor puesta en escena de su espíritu revanchista. Pero suma y sigue… Le toca el turno a José Antonio Primo de Rivera, al que fusilaron los republicanos, el bando en el que se encuadraba el PSOE en aquellos tristes años treinta, y que el Gobierno representa hoy en su alianza Frankestein. Los muertos a ellos debidos también se los imputan a los demás. Y les gustaría acabar con la misma Cruz del Valle, y con los benedictinos que cuidan del conjunto de Cuelgamuros.