Juan Carlos López Rueda es gerente de la empresa Postres Montero, perteneciente al Grupo Reina, y con él hemos hablado para conocer esta empresa de origen malagueño que hoy se ubica en el PTA.
Desde mediados de los años setenta, Postres Montero ha sido un invitado en muchas mesas de los malagueños y los andaluces en general. De origen familiar, la empresa ha ido creciendo hasta situarse en un lugar destacado de los postres de fabricación industrial. En mayo de 2005, la firma apostó fuertemente por la innovación y la producción en cadena, trasladando sus instalaciones al PTA, donde actualmente se desarrolla toda la actividad empresarial.
A finales de marzo de 2007, la empresa fue adquirida por una compañía puntera en el sector, Postres y Dulces Reina, empresa que tiene un origen similar al de Postres Montero ya que el origen de la empresa se remonta al año 1926, cuando la familia Reina funda una industria de chocolates y turrones, que en 1960 derivará hacia la elaboración de productos de pastelería y dulces de Navidad. La inquietud de parte de esta familia hizo que diez años más tarde comenzaran a elaborar postres lácteos, siendo hoy la principal actividad de la empresa.
Postres Montero se dedica a la fabricación de postres refrigerados, entre los que hay una gran variedad de productos, como el tocino de cielo, flan de huevo, natillas con galleta y diferentes sabores, caso del arroz con leche, entre otros.
Sus actuales líneas de trabajo se dirigen a mantener una excelente calidad sin perder la flexibilidad y agilidad en los pedidos de los clientes, además de seguir desarrollando productos.
En el campo de I+D+I, se trabaja en el desarrollo de productos nutricionalmente más equilibrados con un porcentaje inferior de azúcar, y sin perder sus cualidades organolépticas para de este modo ofrecer al consumidor final un nuevo motivo de satisfacción. Hay que añadir que en el etiquetado se ofrecen los valores nutricionales del producto de que se trate.
Por lo que se refiere a la innovación, ésta la entienden en la empresa como el resultado de un trabajo en equipo, bien sea de carácter interno, entre los propios departamentos, o con el apoyo de clientes, proveedores y centros tecnológicos. Los objetivos empresariales referentes a esta innovación suponen alimentos sanos y seguros, sin olvidar el placer, la cultura y la tradición popular. En cuanto a los procesos, hay una innovación radical, y en ascenso, en la mejora de las producciones tradicionales. Otros aspectos a los que la empresa presta especial atención son la seguridad alimentaria y el cuidado del medioambiente.
En cuanto a la calidad de los ingredientes, esta es la clave para la homologación de un proveedor, de ahí que todos los productos estén elaborados con materias primas de primera calidad y sean los proveedores empresas de prestigio reconocido. Además, Postres Montero está certificada según las normas ISO 9001, IFS y BRC de calidad y seguridad alimentaria y la norma ISO 14001, orientando los esfuerzos en disminuir vertidos, en la reducción de los consumos de agua y energía y en el aumento de los materiales reciclados.
La calidad y la seguridad alimentaria son asuntos prioritarios para la empresa, por eso Postres Montero dispone de laboratorio propio en el que se realizan todo tipo de controles de calidad, análisis microbiológicos y físico-químicos.
En la actualidad, el Grupo Postres Reina es líder en el sector de postres lácteos refrigerados, incrementando su producción progresivamente y es una de las 20 empresas españolas con mayor penetración en los hogares de nuestro país.
El futuro de los postres tiene mucho que ver con la búsqueda de nuevos sabores y productos cada vez más saludables, pero sin perder ese componente de placer que hace del consumo de los postres un capricho que todos nos concedemos con mayor o menor frecuencia. En cuanto al gusto de los consumidores, se detecta con el paso de los años más diversidad en las preferencias porque los consumidores buscan nuevas experiencias, también nuevos sabores y se cansan con mayor facilidad. El control del azúcar y las calorías, cada vez se tiene más en cuenta y son dos de los signos del presente.