De todos son conocidas las terribles consecuencias, materiales y humanas, que pueden llegar a acarrear un incendio en todo tipo de contextos, como residencial, comercial, medio ambiente y, por supuesto, industrial; por eso, se hace sumamente indispensable una eficaz prevención en materia de incendios.
En el ámbito empresarial, se pueden distinguir dos actuaciones principales, una denominada protección pasiva, en la cual se deberá cumplir con la normativa vigente, tanto en edificaciones como en establecimientos industriales, encaminada a una adecuada seguridad de los elementos constructivos e instalaciones frente a un posible incendio.
Por otro lado, se encuentra la protección activa, encaminada a dotar a los establecimientos de los medios de detección y lucha contra incendios adecuados en función de sus características y actividad.
Es de una gran importancia dar una adecuada información y formación a los trabajadores en materia de lucha contra incendios y evacuación de los lugares de trabajo.
La información irá principalmente encaminada a unas medidas preventivas destinadas a evitar la formación de incendios y al reconocimiento de la señalización correspondiente de los medios de lucha contra incendios y evacuación.
Asimismo el empresario deberá de dar una apropiada formación teórico-práctica para el manejo de medios de lucha contra incendios y una adecuada aplicación de las medidas de evacuación de trabajadores, para aquellos trabajadores designados para poner en práctica las citadas medidas; como igualmente al resto de empleados, para que actúen de forma adecuada ante una situación de emergencia.
Desde la dirección de la empresa se debe de optar por una política de concienciación y realización de prácticas, tanto en el uso de medios de lucha contra incendios como en la ejecución de simulacros de evacuación, encaminadas a adquirir experiencia para actuar con diligencia y eficacia ante una posible situación real de emergencia.