José Seguí, arquitecto de los hoteles Miramar y del dique de Levante
Arquitecto por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid (1971), funda y dirige “Estudio Seguí, Arquitectura y Planeamiento “ desde 1975 con Sedes en Málaga y Madrid.
Premio Nacional de Urbanismo en 1985 y 1987 (Gobierno central), Premio “Europa Nostra” de Rehabilitación (Unesco) en 1986, Premio Internacional “Gubbio” (Asociación Nacional Italiana de Centros Históricos) en 1997. Funda y dirige la revista Geometría (Premio Nacional de Edición, 1987) y los “Talleres Internacionales de Paisaje”.
Ha obtenido primeros premios en diversos concursos de arquitectura (Ciudad de la Justicia en Málaga, Auditorio de Almería, Puerto de la Bajadilla de Marbella, Pabellón Olímpico de Almería, Hotel Miramar…), y planeamiento (Planes Generales de Granada, Córdoba, Jaén, Antequera… y Planes Especiales de la Alhambra, Puerto Real, Tánger City Center, Rio Guadalmedina de Málaga…).
José Seguí es ya en Málaga y su provincia una referencia ineludible de su presente por su activa participación en el desarrollo urbanístico y arquitectónico. Dos nuevos proyectos se suman a su dilatada carrera profesional, el Hotel Miramar y el que se levantará en el dique de levante de la ciudad. Como él mismo reconoce, la labor de un arquitecto o la materialización de ésta en un edificio no están exentas de controversias pero forman parte del necesario debate ciudadano que una ciudad en constante evolución genera. Con él hablamos del momento que Málaga y la Costa del Sol viven, plenos de posibilidades.
Vicente Almenara
¿Cómo surgió la idea del hotel del puerto y los contactos con el grupo catarí para su construcción?
Se trata de un grupo inversor que buscaba en Málaga y en la Costa del Sol nuevas oportunidades para realizar una oferta hotelera de alta gama, precisamente por el importante desarrollo turístico que la ciudad de Málaga está teniendo debido principalmente a sus importantes ofertas culturales y museísticas, así como la incorporación de usos turísticos del puerto con sus remodelaciones urbanas y atractiva oferta de cruceros.
¿Cuáles fueron las fuentes de inspiración arquitectónica del hotel?
El principal objeto era diseñar una propuesta arquitectónica que pudiera integrarse en el perfil marítimo puerto-ciudad y referenciarse con los principales hitos paisajísticos de dicho perfil. En este sentido huíamos de una arquitectura grandilocuente o excesivamente protagonista y, por el contrario, planteamos un diseño más sutil que pudiera convertirse en esa primera referencia que el visitante que accede a la ciudad desde el mar con los cruceros se encontraran como un signo de modernidad de la ciudad que le pudiera ofrecer esta propuesta arquitectónica.
¿Se siente seguidor de alguna escuela de arquitectura nacional o internacional?
Creo que la arquitectura no debe ser un producto de modas sino de concretas respuestas para resolver determinados problemas. Evidentemente, partimos de un conocimiento no sólo de los problemas, sino también de la práctica de este oficio de la arquitectura que se basa en reinterpretar su herencia cultural histórica desde la que intentamos abordar el futuro. En este sentido, somos seguidores en todo caso de esas buenas herencias universales que nos aporta la arquitectura, que reinterpretamos y adaptamos a nuestras necesidades, y principalmente a las características del lugar en dónde se ubica.
¿Cómo ha recibido la oposición de parte de la ciudad al hotel?
Un edificio singular como el que hemos diseñado siempre es motivo de polémica. La edificación en altura no deja de ser una excepcionalidad que debe ser analizada desde el lugar en dónde se ubica y del uso a la que se destina. Por tanto, el debate no sólo es necesario sino también muy importante para justificar la actuación e incluso mejorarla si fuera necesario. En estos momentos, el proyecto se encuentra precisamente en esa tramitación administrativa con los debates públicos que ello exige.
¿Y el Hotel Miramar?, ¿es solo una recreación del hotel que fue o es algo más?
Del Hotel Miramar siempre he manifestado que es algo más que una instalación hotelera. Rehabilitar este edificio como hotel, es recuperar no sólo su uso original sino también una importante etapa histórica de la ciudad de Málaga. El “Gran Hotel Miramar”, como se denominará, ha sido testigo de los grandes acontecimientos de la ciudad y lugar de encuentros de sus personajes históricos. Recuperar el edificio exigía también tener en consideración estos aspectos que forman parte de la memoria colectiva de la ciudad, y precisamente estas cuestiones han sido las mayores virtudes de la rehabilitación que hemos llevado a efecto gracias a la confianza del grupo Hoteles Santos que nos brindó esta oportunidad desde el propio concurso público de adjudicación del edificio por parte de la Junta de Andalucía hasta su total ejecución.
¿La arquitectura en Málaga es producto del perfil profesional del arquitecto o responde a unas pautas tradicionales, administrativas…?
Cada ciudad tiene su arquitectura y Málaga es un reflejo del importante desarrollo que se ha producido históricamente en la ciudad, principalmente desde mediados del pasado siglo. Todo ello ha generado excelentes referencias arquitectónicas y también desajustes en su producción, en las mismas proporciones que se hayan podido dar en otras ciudades de similares características. Es evidente que la ciudad es fiel reflejo del perfil profesional y pautas tradicionales que se han producido en cada momento histórico de la ciudad.
¿Hay sectores activos en la ciudad contrarios a la modernidad tanto en la arquitectura como en las artes urbanas en general?
Es cierto que existe una cierta actitud nostálgica de ciertos sectores en plantear su oposición a la necesaria transformación de la ciudad como un acto de purismo estático o museístico, quizás por su falta de entendimiento e incapacidad en poder analizar y descubrir las razones por las cuales se transforma la ciudad históricamente en su continua búsqueda de adaptarse a una necesaria modernidad que demandan las nuevas necesidades de la ciudad. Esta actitud nostálgica del inmovilismo en el pasado, es realmente la consecuencia de su falta de conocimiento por abordar y entender las transformaciones de la ciudad que se produjeron en el pasado desde las cuales se planifica en el futuro.
¿Las Administraciones cansan a los potenciales inversores y éstos se marchan?, ¿qué podría hacerse para retenerlos?, ¿qué reformas de la Administración cree necesarias para progresar?
Es cierto que los procesos administrativos son excesivamente largos y complejos, debido muchas veces a normativas confusas y contradictorias en sus contenidos que merecerían adaptarse a una realidad más tangible. Estas dificultades de interpretación y lentitud de resolución, van en contra de la agilidad que demandan los inversores que están sujetos a procesos económicos más eficaces y dinámicos.
¿Cuál es el futuro previsible de la ciudad en cuanto a su ordenamiento urbanístico y su desarrollo?
Málaga es una ciudad con un gran potencial de futuro. Actualmente está viviendo unos momentos de importante auge económico, debido principalmente a una acertada política turística y de renovación urbana.
Su oferta cultural con sus nuevos museos y rehabilitación de su Casco Histórico y la importante repercusión de su nueva oferta del turismo de cruceros, la han convertido en una referencia no sólo nacional sino también internacional para los mercados turísticos y servicios añadidos y que están generando una potente base económica y de desarrollo de la ciudad.
¿La Costa del Sol es un mundo aparte?
Creo que la Costa del Sol se conforma actualmente como una autentica conurbación, en donde su principal característica es la permanente actividad urbana superando las estacionalidades turísticas. Se ha pasado del concepto de la Costa del Sol a la “Ciudad” del Sol, ya que dicha conurbación conformada por sus diferentes municipios se comportan e interconectan como una auténtica “ciudad territorial”, y quizás radique en esta importante escala su mayor valor urbanístico.
¿Es reversible el daño que una construcción desordenada haya podido hacer en la Costa del Sol?, ¿cómo corregir los errores del pasado?
Me atrevería a decir que la Costa del Sol es quizás uno de los asentamientos turísticos del Mediterráneo con mayores potencialidades turísticas y con mejores posibilidades para reconducir sus desarrollos urbanísticos.
A pesar del desarrollismo de estos últimos años, su excepcional territorio ofrece un adecuado equilibrio paisajístico en su relación con el frente litoral y la Sierra que le sirve de telón de fondo. Aunque Marbella se conforma como el centro de una oferta turística singular y de alta gama, se complementa con sus municipios colindantes, tanto del litoral como de la sierra, que se potencian en su diversidad de ofertas turísticas y servicios.