Los principales mercados aceleraron las subidas alentados por el mayor optimismo en cuanto a la evolución sanitaria, macro (ligero rebote de indicadores adelantados de ciclo, propuesta europea de reconstrucción) y por un final de viernes sin sanciones de Estados Unidos a China, “sólo” el final de su “relación” con la Organización Mundial de la Salud.
Este mayor optimismo se vio respaldado al presentar la Comisión Europea su propuesta de Fondo de Reconstrucción, largamente esperada. El plan alcanza 750.000 mln eur, de los cuales 500.000 mln eur vendrían en forma de transferencias (ayudas directas no reembolsables, en línea con la propuesta de Merkel-Macron de la semana pasada) y 250.000 mln eur en forma de préstamos. El paquete de estímulo fiscal se financiaría parcialmente con emisión conjunta de deuda que se repagará entre 2028 y 2058 a través del presupuesto europeo. También se espera movilizar otro billón de euros dentro del presupuesto comunitario 2021-27, vinculado a la economía verde y a objetivos medio plazo. En cuanto al reparto del fondo: 81.800 mln eur para Italia y 77.300 mln eur para España en transferencias a fondo perdido (nuestro país también recibiría 63.100 mln eur en préstamos).
Destacó en EEUU, la firma de una orden ejecutiva de Trump contra las redes sociales provocó caídas del sector tecnológico. Trump ha firmado una orden ejecutiva contra los gigantes tecnológicos como Twitter y Facebook que busca limitar la inmunidad con la que actualmente cuentan (están exentas de responsabilidad legal por el contenido publicado por los usuarios) y abre la puerta para que se permita castigar a las firmas por su gestión de contenido. Esta nueva ley responde a la decisión de Twitter de cuestionar varios mensajes del Presidente y podría provocar una serie de demandas contra Twitter, Facebook y otros gigantes tecnológicos.
En cuanto a datos de actividad, el PIB 1T 20 en EEUU se revisó -0,2 pp hasta -5,0% a pesar de la mejor lectura del consumo, que también batió previsiones. El dato final de Alemania confirmó la caída preliminar de -2,2% mientras que el de Italia se revisó a la baja -0,6pp hasta -5,4%.
Esta semana, y en materia de bancos centrales, se reúne el BCE el jueves 4 de junio, con el mercado dividido en torno a si debería anunciar ya un incremento de su QE, ampliándolo en 500.000 mln eur durante seis meses más (hasta junio 2021). A favor de hacerlo tan pronto estaría: 1) el pesimismo sobre la evolución del PIB 2020, tras confirmar Lagarde esta semana el empeoramiento del escenario macro, dando por perdido su escenario suave (-5%) y considerando más realista un rango de PIB 2020 -8%-12% (entre el escenario medio y severo iniciales), sobre lo que tendremos más claridad con la actualización de su cuadro macro el jueves; 2) la inflación se sitúa en mínimo de cuatro años en la Eurozona (IPC general 0,1% en mayo ante la fuerte caída del componente energético, IPC subyacente 0,9%), con la consiguiente presión sobre su objetivo de estabilidad de precios; 3) evitar nerviosismo en el mercado a medida que se vaya completando el actual programa PEPP (750.000 mln eur que se agotarían en octubre de mantenerse el actual ritmo de compras, 26.000 mln eur semanales).
En cuanto a nuestra visión de los mercados, seguiremos de cerca la evolución de la desescalada, si ésta tiene éxito o no y, por derivada, cuál es el ritmo de recuperación económica y con ella el impacto final en BPAs, para lo que aún no existe demasiada visibilidad. La continuidad en la ralentización del ritmo de contagios sigue siendo condición necesaria, aunque no suficiente, para ver un rebote sostenido en los mercados y habrá que mantener un cuidadoso equilibrio entre reactivación económica y distanciamiento social para prevenir un repunte en las infecciones. En este contexto, mantenemos la cautela en nuestras carteras, primando la exposición a sectores regulados o considerados esenciales, y compañías con mayor flexibilidad para adaptarse al entorno actual y con posiciones financieras más conservadoras, que puedan mostrar un mejor comportamiento relativo, sin descartar que el mercado ofrezca mejores puntos de entrada.