Cuando Pablo Iglesias anunció su salida del Gobierno para acudir como contracandidato a Isabel Díaz Ayuso – sin que sus afiliados hayan sido consultados- se atrevió a decir que Yolanda Díaz es la mejor ministra de Trabajo de la historia de España.
Bueno, los datos son los datos, aunque le molesten al mentiroso. Desde que la ministra tomó posesión del cargo, el número de parados ha crecido en 762.000. La tasa de paro española ha aumentado casi el triple que en Europa (un 2,5% frente al 0,9% de la Eurozona). Pero hay más, España es el país de Europa en el que más crece la desigualdad salarial, según el Informe Mundial de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) de diciembre de 2020, un 36,1% entre las rentas más altas y las más bajas.
Pero no nos olvidemos del género, concepto tan grato a Iglesias. España es el país de la UE donde más creció el paro entre las mujeres en 2020 y es que en España la tasa de paro femenina ha crecido más que en ningún otro país, pasando del 15,7% al 18,4% actual, casi tres puntos más; para mayor abundamiento, el pasado mes de febrero, el 70% de los nuevos parados eran mujeres.
Por no extendernos demasiado, Yolanda Díaz, junto a la ministra de Igualdad, aprobó por ley un registro salarial y una auditoría a las empresas para acabar con las desigualdades salariales por razón de sexo, y afirmaron que era “un logro histórico”. Falso también. La igualdad legal acaba de cumplir 41 años una semana antes y se debe a Rafael Calvo Ortega, ministro de Trabajo, y la ley 8/1980 de 10 de marzo del Estatuto de los Trabajadores. Artículo 28. Todo así. Mienten como bellacos.